lunes, 1 de septiembre de 2014

Capitulo 23


Hola chicas
Bueno aquí está el capítulo de hace días que iba a subir pero no podía porque mis abuelos no me han dejado nada de tiempo y antes de irme a dormir porque estoy muy cansada quería dejarles el capítulo que espero y sea de su agrado. El siguiente al igual que este será largo espero que les guste :D
por cierto probablemente y suba un adelanto del capitulo en mi FaceBook, es que empezare a hacerlos mas extensos aunque actualice dos o tres veces a la semana :D





Capítulo veintitrés: Ayúdame


Andy me miro, estaba ahí y Tom y yo no podíamos hablar, eso de correr a las personas era algo que a mí no se me daba mucho.
Le sonreí un poco desanimada, el entendió y nos dejó solos.
— ¿Aun te duele?—Negué y lo me recosté en su hombro. Si me dolía un poco pero quería estar con él, después de ahí no nos variamos hasta entrando de vacaciones.
—Tom—Me miro
—Sabes algo, Adela quita esa cara de flojera que tienes el día de hoy.
—Lo siento es que me siento rara.
—Vieja, dirás ya tienes quince
—Oye no estoy vieja, solo soy un año mayor—Reímos y mi tía nos trajo algo de pastel—Por cierto de plano no nos veremos porque iré a visitar a mi abuela, a Halle y de ahí a visitar a mi tía Nicole.
—Pues se me ocurrirá algo para verte.

El resto de la fiesta me la pase a lado de Tom, platicando y riéndonos, mi tío no cuestiono nada y solo trato de pasarlo, no quería pero sabía que aceptaría. Tarde o temprano.
Suspire  aliviada cuando todo eso acabo, cuando al fin estaba en mi cama durmiendo, claro solo después de que me llevaron al doctor y, el dijeron que solo era una torcedura.
Sabía que dentro de algunos días más mí tío nos llevaría a mí y a Bill con la abuela, ella vivía sola en una maravillosa y relajante casa de campo, mi abuelo había muerto dos años atrás y ahora ella estaba ahí sola porque no quería irse a vivir con mis tíos para ella era mejor vivir sola y recibirnos algunos días a mí y a Bill.

—Como han crecido—Abuela nos saludó a ambos con un beso en la mejilla, observo a mi tío y también le dio un beso.
—Abuela que gusto de verte—Ella sonrió y me dio un fuerte abrazo.
—Los esperaba ansiosa, ¿Te quedaras?—Le pregunto a mi tío.
—No me voy solo pasaba a dejarlos. Pórtense bien con su abuela.
—No te preocupes papá la cuidaremos.
Mi tío nos dejó con ella, y preparamos algo para comer con ayuda de nuestra abuelita.
Como dije ella vivía en un lugar tranquilo y para mí era relajante estar en esa casa, porque todo era tranquilo, lo único malo que había era que no había mucha señal en los teléfonos móviles. Y para hablar con Tom casi me  tenía que subir a la copa de un árbol.

[~]

Los días comenzaron a pasar rápido, lo que hacíamos era platicar con la abuela, ayudarla en una que otra labor de la casa y después de aquello nos dedicábamos a descansar y no hacer nada, no me aburría aquello pero tampoco me gustaba.
— ¿Qué les parece si salimos a caminar un poco?—Propuso la abuela
—Sí. Claro es buena idea—Bill me miro, era un día preciosa, mejor dicho una tarde preciosa, en unas horas más el sol se escondería.
Salimos con nuestra abuela cada uno la  tenia del brazo, nuestra abuela caminaba despacio y ambos seguíamos su paso, platicaba de muchas cosas como del clima, de nosotros, de lo grande que estábamos.

—Me recuerdan mucho a sus padres. Mi preciosa Adela tan hermosa y delicada, a mí me hubiera gustado tener una niña pero el tener a sus padres fue lo mejor que me ha pasado. Bill eres un chico especial, tratas muy bien a tú prima.
—Ella es como mi hermana así la quiero, además si supieras todo lo que ha hecho, ¿Puedes creer que el chico más malo la quiere demasiado? Bueno Tom no es malo solo quiere ser malo pero no le queda, es una buena persona aunque él no lo quiera aceptar.
—Si Tom está loco, pero lo quiero mucho.
—Bill ¿Tú tienes novia?
—No abuela, pero Adela.
—deja de estar quemándome, sabes que si tengo novio y lo quiero mucho.
—Se pelean como sus padres lo hacían—Mi abuelita reía y no dejaba de hacer bromas igual que Bill me las hacia a mí.
Pero después ella y yo buscamos como hacerle bromas a Bill.
— ¿Y no vas a ver a Tom?
—No sé, aun no se le ocurre nada. Pero la verdad es que si quiero verlo lo extraño es que también quiero ver a Andy. ¿Eso está mal?—Bill me observo sin saber que decir. Nunca se había encontrado, sin embargo busco las palabras adecuadas.
—bueno Adela tú quieres a ambos pero debes de sentir con más intensidad eso que sientes por alguno en especial. No se búscalo en alguna parte debe de estar esa persona, debes de extrañar a uno más que al otro.
—Quiero dejar de ser Daniel—Bill me miro y se sentó a mi lado
—Eso es más  complicado, bueno a lo mejor y no tanto. —Dudo pero decidió continuar—Podrías decirles que te vas a otro país o no se a otra ciudad y después Daniel desaparece dl mapa.
—Bill ese tipo de cosas no me gustan, sé que Tom me mataría se le digo que todo este tiempo le eh estado mintiendo, Andy lo sabe y para él está bien.
—Pero para ti no, y la verdad es que no te culpo porque eso de engañar a las personas está mal.
—Si estoy mal—Le dije y el solo me abrazo, tenía que pensar en una forma de cómo acabar con Daniel
—tienes que pensarlo muy bien Adela, si quieres a Tom y él te quiere a ti.
— ¿Él lo entenderá?
—Probablemente.

Toda la noche estuve pensando en mil posibilidades de acabar con Daniel, pero ninguna era con la salida valiente, todas eran por huidas y la verdad es que ese tipo de cosas a mí no me gustan. Solo pensaba en que todo se resolvería en que Tom perdonaría todo esa mentira.
Me mando un par de mensajes de texto que yo no conteste porque no sabía que decir, porque no podía decirle nada.
En todo ese tiempo no fue la única persona a la que extrañe, si, si y si adivinaron: Andy.
Eran dos casos completamente diferentes, odiaba admitir que me gustaban dos chicos, odiaba pensar tanto en ellos, y si estoy consciente de que piensas que soy una bipolar y todo eso, pero la verdad es que no puedo evitarlo. Los extraño a los dos.

[~]

— ¿Y cuándo decidiste salir con él?—Bill me miraba desde la esquina de mi habitación,—¿Abuela lo sabe?
—Ella lo propuso—Me acomode mi cabello y le sonreí.
—Tienes muchos problemas Adela, o es Andy o es Tom. Y si yo fuera tu no elegiría a ninguno, los dos son tan idiotas que no me sorprende que sean amigos.
—Como sea, Bill necesito de tu ayuda.
—Te escucho—se acercó a mí y soltó un suspiro—Sabes que lo hare sea lo que sea, después de todo eres como mi hermana.
—Se lo diré.
— ¿De verdad?
—Sí, pero no hoy, porque hoy voy a salir con Andy
—Eso es lo que no me gusta, que estoy dispuesto a ayudarte pero tu no. Porque sabes que los dos te gusta mucho, y no tratas de alejarte de uno, para ver a quien extrañas o quieres más.
—Bill no puedo hacer eso.
—Dime como le dirás a Tom que estas saliendo con Andy.
—Andy es un amigo más.
—Un amigo que te gusta mucho.
—Bill—Tenía razón, pero no podía aceptarlo—Solo escúchame, Tom me envió un mensaje y me dijo que la semana que viene el ira a verme a casa de mi tía y vamos a ir a un lugar que no te puedo decir, y ahí se lo diré.
—Lo dices tan fácil.
—Sé que me lo estoy tomando todo muy a la ligera pero…
—Pero nada Adela, nada, hoy vas a salir con Andy ¿Y que se supone que van a hacer?
—Le diré que es un tonto y que su plan se echó a perder porque le diré a Tom todo.
—Como tú digas, está bien, ve y cuéntale todo eso al imbécil de Andy.

Bill no estaba muy a gusto con la situación yo estaba tranquila al menos trataba de aparentar todo eso pero sabía que algo iba a salir mal solo esperaba el día en que Tom estuviera enfrente de mí, para decírselo todo, iba a echar por la borda los planes de Andy y también lo míos lo que tenía en un principio.

—Hola Adela—Lo primero que hizo Andy al verme fue abrazarme. Yo igual lo abrace y me sentí bien, demasiado diría yo.
— ¿Y a donde me llevaras hoy?—nos separamos y sonrió con ánimos
—A un lugar en donde no haya dulces y cosas que te hagan reír por más de una hora como loca.

Caminamos sin decir nada.
Como dije la idead había sido de mi abuelita, eso de hablar con Andy y después con Tom. Yo hubiera preferido que fuera al revés porque claro Tom era mi novio y Andy mi amigo, pero no se pudo por que Tom estaba con sus padres en diferentes eventos sociales. Y solo encontró espacio o más bien la manera de escaparse la siguiente semana.

—Y cómo te la has pasado
—Más o menos
—Pensé que bien, ¿Por qué más o menos?
—Pues es que no está Tom.
—Ah, claro Tom—trato de disimular su enojo y desilusión cuando mencionaba a Tom.
—Y por qué no estás tú—Me miro confundido, pensando que había escuchado mal tal vez, pero la verdad era que no había sido casualidad que dijera eso, había sido lo que yo sentía en ese momento.
—Enserio que las vacaciones ya te afectaron
—No claro que no me han afectado, solo digo la verdad.
—Si claro.

No sabía a dónde íbamos solo me di cuenta que estábamos afuera de la ciudad cuando el paisaje que tenía enfrente era de árboles y de color verde; me gustaban ese tipo de lugares, y pensé que tal vez sería el mejor lugar para platicar con Andy.
Aquel lugar era como un prado o algo así no sabría decir bien lo que era.
Ambos salimos y Andy se sentó en la parte de adelante del coche yo examinaba bien el lugar me parecía lindo y tan poco adecuado para que dos personas que dicen llevar una relación de amistad estuvieran ahí, aquello me olía ya más a romance. Aun que me gustaba en cierta forma.

—Ven aquí—Andy extendió su mano ofreciéndomela, yo la tome y el me acerco más a él. —No me digas que Tom nunca te ha traído aquí.
—No la verdad es que nunca me había traído aquí.
—Es raro, recuerdo que la encontramos hace un año con Georg, él y yo.
—Es muy bonito. —Entrelace mis dos manos con las de él, estaba de pié frente a él.
— ¿En qué piensas? De repente de quedas callada y otras veces dices cosas sin sentido.
—En ti en Tom, en muchas cosas.
 — ¿Piensas en mí?—Asentí— ¿En qué exactamente? Si se puede saber, claro—Me quede pensativa una vez más, lo mire varias veces antes de contestar, y es que en realidad no sabía que contestar.
—Andy, te quiero—Se quedó callado, la igual que yo, no podía creer que yo dije eso.
— ¿Tú me quieres matar? Solamente.
—No, no es así.
—Entonces tú me quieres lejos de ti.
—No me refiero a que te quiero como quiero a Tom.

Se quedó nuevamente callado esta vez su expresión cambio totalmente, serio, pensativo, sorprendido, sin palabras; había tantas formas de explicarlo que no sabía cuál era la adecuada.

—Eso no me lo esperaba
—Yo menos—Me acerco más a él y me abrazo.
—Eso quiere decir que—Hablo muy cerca de mi oído, —Me refiero…a que… tengo una oportunidad.
—No sé—ahora sentía venir eso, sentía que las lágrimas iban a salir pronto. ¿Por qué? Yo no estoy acostumbrada a llorar y menos por chicos. —La semana que viene voy a ver a Tom y le diré todo lo de Daniel. Probablemente él no quiera estar más conmigo, pero eso está bien porque creo que terminare con él. —suspire y contuve las lágrimas—Pero no quiero que te ilusiones por que  no lo dejare para andar contigo.

Nos quedamos callados por varios minutos, después Andy hizo que nos separáramos y me miro desilusionado, me volvió a abrazar y otra vez nos quedamos así.

[~]

Una semana paso muy rápido y cada vez que pensaba en Tom pensaba en que el día cada vez llegaba, como le dije a Andy tal vez después de eso el ya no quería saber más de mí, pero era lo mejor.
Mi tío nos había ido a buscar con la abuela y de ahí me había llevado a casa de mi tía Nicole y a Bill con una de las hermanas de su madre, entonces me había separado de Bill.
Tom había llamado un par de veces pero esta vez no conteste porque me estaba bañando cuando el llamo, y estaba al pendiente cuando el volviera a llamar.

—Adela llevo varios días tratando de hablar y no contestas.
—Lo siento, es que eh estado un poco ocupada.
—Bueno no importa ¿Lista para mañana?
—S-si



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